En los últimos años, la tarjeta de identidad nacional electrónica (también conocida como eID) se ha introducido en numerosos países alrededor del mundo. Además, están siendo utilizados con entusiasmo cada vez mayor por sus ciudadanos.
Pero en países que aún no han adoptado tal tecnología de tarjeta inteligente basada en microprocesador, todavía se expresan serias preocupaciones. Las críticas comunes de los esquemas de identificación electrónica incluyen:
- la amenaza potencial que representan para los derechos civiles y la privacidad
- la falta de confianza en la seguridad de esos sistemas
- y la creencia de que simplemente son innecesarios e irrelevantes.
Sin embargo, una evaluación medida de las muchas implementaciones exitosas de documentos nacionales de identidad electrónica actualmente en marcha ofrece cinco respuestas claras y convincentes a estos y a otros temores.
#1: La identificación nacional y el mundo digital.
En la última década, el número de intercambios digitales se ha incrementado de manera exponencial. Sin embargo, el evidente atractivo de la facilidad de uso va de la mano de la percepción generalizada de que los medios electrónicos son relativamente frágiles.
La ausencia de la "prueba por escrito" y de los testigos oculares tradicionales, característica de las formas electrónicas de intercambio, han llevado muy rápidamente a la necesidad de una solución que pueda garantizar la identidad del emisor y del receptor.
Desde 1997, se ha intentado cumplir ese requisito a través del diseño, la producción y el despliegue de tarjetas de identidad nacional electrónicas seguras. Como resultado, la idea de una tarjeta de identificación válida tanto para los dominios físicos como para los digitales se ha convertido en una realidad para millones de personas.
Algunos países visionarios también han dado el salto a la identidad móvil o m-ID, es decir que han creado un mecanismo -iniciado mediante el componente del eID nacional- para acceder a servicios en línea con un alto nivel de seguridad, gracias a los dispositivos móviles, como se detalla en nuestro informe técnico de diciembre de 2014 sobre nuestros esquemas nacionales de ID móvil.
Hoy en día, más de 60 países han puesto en marcha un sistema de identidad nacional, y la mayoría de ellos está emitiendo tarjetas de identidad nacional electrónica.
Además, el formato electrónico de dichas tarjetas significa que, además de estar empleados para aplicaciones de firma electrónica, también son ideales para otros casos de uso, como se detalla en nuestro informe sobre las tendencias de Identificación nacional actualizadas en enero de 2018.
Por lo general, esto puede incluir otorgar al usuario acceso a las infraestructuras de la empresa o ubicaciones seguras, así como incorporar tarjetas de seguridad social y, en algunos países, licencias de conducir, tarjetas de salud, "tarjetas de pase" para servicios de transporte, tarjetas de pago e incluso tarjetas bancarias. Estas son las que están dando a luz a una gran cantidad de aplicaciones que detallamos en nuestros dossiers sobre Estonia, Bélgica, Portugal o Alemania.
Por lo general, esto es lo que descubrimos en nuestro estudio de viaje de invierno a Kuwait este año. Vimos aplicaciones innovadoras y útiles. Con la nueva Identificación civil, cualquier ciudadano puede acceder a los servicios electrónicos de seguridad social, utilizando su eID como la herramienta principal de autenticación en una nueva red de kioscos de autoservicio.
Kuwait Oil Company ha desplegado kioscos de autoservicio para sus empleados para simplificar la emisión de certificados de recursos humanos y nómina. Los empleados ahora pueden acceder al servicio utilizando su eID para ver e imprimir todos los documentos requeridos con total privacidad. Kuwait Credit Bank ha implementado la identificación electrónica nacional como la herramienta más segura para acceder a sus servicios en línea y solicitar préstamos gubernamentales. La tarjeta también es la clave para la autenticación a través del portal web del banco.
#2: La tecnología utilizada es robusta y adecuada para el propósito
Mediante el uso de tarjetas bancarias "inteligentes", todos los días se mueven miles de millones de dólares en todo el mundo sin que sean robados.
La misma tecnología se puede utilizar para hacer frente a la creciente amenaza del fraude de identidad.
La tarjeta inteligente basada en un microprocesador (y la tarjeta SIM de su teléfono móvil) que protege las credenciales de identidad se considera el medio más seguro de autenticación. Hace posible la prevención del fraude de identidad y protege eficazmente los datos personales de los ciudadanos. Es por eso que se ha establecido como el medio por elección para la concesión de acceso a las aplicaciones de gobierno electrónico.
Este enfoque también puede usarse para alojar una serie de otros servicios y casos de uso, tales como los pagos electrónicos, las billeteras electrónicas, las firmas digitales, la autenticación, la identificación y las tarjetas de viaje.
También hay que señalar que desde el año 2006 esta tecnología protege los documentos de viaje, comúnmente conocidos como pasaportes electrónicos, en alrededor de 120 países.
#3: Un documento de identidad nacional electrónica puede conducir a una mayor transparencia
Un ejemplo de un esquema nacional de identidad que empodera a los ciudadanos es el del proyecto de identidad electrónica de Bélgica.
La ley que acompañó la introducción de la nueva tarjeta de identidad electrónica en Bélgica requería que el gobierno ofreciera a los ciudadanos una aplicación llamada "Mi Archivo", a la que se puede acceder en línea. Permite que los ciudadanos sepan quién accedió a sus datos personales, les brinda un formulario de consulta o de queja, y también pueden solicitar que el gobierno proporcione una explicación a cualquier acceso registrado. En otros numerosos esquemas de identidad electrónica de Europa también aplican derechos similares.
Como resultado, se observa un principio democrático fundamental: cuando se introduce una nueva restricción (en este caso, las huellas digitales), se proporciona un nuevo derecho (la transparencia). Cada vez que un funcionario del gobierno accede a los datos del Registro Nacional de Bélgica, se genera un registro que indica la identidad y el lugar de trabajo del funcionario que accedió a los datos personales de un ciudadano, así como la fecha en que ocurrió dicho acceso. Durante los seis meses siguientes al acceso, el ciudadano puede consultar su base de datos personal para ver esa información.
#4: "1984" nunca ocurrió
El temor de que un sistema de tarjeta de identidad represente el inicio de una pendiente peligrosa hacia una mayor vigilancia y un mayor control de los ciudadanos ha demostrado no tener fundamentos.
En pocas palabras, el escenario opresivo descrito por George Orwell en su novela "1984" nunca ocurrió.
Un esquema nacional de identidad no es sinónimo de gobiernos totalitarios que ejercen un poder absoluto.
La realidad es que "1984" no se hizo realidad en Austria, Finlandia, Italia, Suecia, España, Alemania, Bélgica, los Países Bajos, Luxemburgo, Estonia, Lituania, Malasia, Sudáfrica, Uruguay o Chile, por nombrar solo algunos de los 50 países que hasta el momento han adoptado la identidad electrónica.
Y recuerde: una tarjeta de identidad electrónica siempre permanecerá donde usted desea: en su bolsillo o su teléfono móvil.
Solo usted decide cuándo y dónde usarla.
#5: La identificación electrónica (eID) es un eslabón central de la cadena de confianza
La cuestión de la continuidad jurídica está en el centro de la transformación digital de nuestros intercambios y nuestras transacciones. Independientemente del medio de comunicación, los intercambios digitales deben disfrutar de la misma seguridad jurídica que sus equivalentes físicos.
Los gobiernos de todo el mundo están tratando de aumentar la eficiencia, el desarrollo económico y la inclusión, con el fin último de servir mejor a los ciudadanos, de una manera confiable, segura y transparente.
El Reino Unido dijo "no" a una tarjeta de identificación nacional, pero "sí" a un esquema nacional de identificación electrónica
El caso de la identificación nacional en la India: la identificación es el número
Lanzado en 2009, Aadhaar es ahora el esquema de identificación biométrica más grande del mundo con 1,2B de personas inscritas.
Con Aadhaar, cada residente mayor de 18 años recibe su propio y exclusivo número de Aadhaar de 12 dígitos.
Es un número de identidad digital único y universal que cualquier entidad registrada puede usar para "autenticar" a un residente de India.
El número único y la información biográfica se imprimen en un documento de papel conocido como la tarjeta Aadhaar
Cualquier persona que haya vivido en la India durante 182 días puede inscribirse en Aadhaar para obtener una prueba de identidad. Así que es una tarjeta residencial y no una tarjeta de ciudadano per se.
Esquemas de identidad nacional
Las naciones despliegan sistemas nacionales de identidad confiables no solo para racionalizar los servicios y los procesos en áreas que incluyen los servicios sociales, los impuestos, las elecciones locales y la administración, sino también para promover los servicios privados mediante la estimulación de la economía digital, y todo ello al tiempo que reducen los costos.
Pueden obtener los dividendos digitales de manera muy efectiva, como lo demuestra nuestro informe web de agosto de 2016 y el Informe de mayo dl 2016 del Banco Mundial.
Gemalto cree que las economías digitales modernas se construyen sobre la implementación de una identidad digital confiable para los ciudadanos. Solo así se puede garantizar el nivel necesario de confianza en el Internet y en los dispositivos móviles del futuro, con soluciones de autenticación y de firma interoperables, a través de la implementación de dispositivos portátiles seguros ("elementos seguros"), tales como tarjetas SIM PKI (infraestructura de clave pública), tarjetas de identidad, y muchos otros dispositivos innovadores.
Nuestra experiencia mundial ha demostrado que la implementación de una identidad electrónica segura y confiable es esencial para la adopción entusiasta e incondicional de soluciones de gobierno electrónico por parte de los ciudadanos. Ellos son quienes deben llevar el objeto físico en su persona -una caja fuerte digital que contiene su identidad, sus datos personales y sus derechos-, el cual les permite la autenticación robusta a través de, al menos, dos factores: "algo que tengo" (mi dispositivo móvil seguro) y "algo que sé" (mi código confidencial).
En general, el mensaje clave para los que tienen preocupaciones sobre los esquemas de identidad nacional electrónica es que la seguridad y la vigilancia no son la misma cosa.
¿Qué es la seguridad en la era digital?
La seguridad nos da el poder de ser más creativos en la promoción de nuestro bienestar, a la vez que limita los efectos de la incertidumbre. La seguridad no es algo que nos limita o nos restringe. En cambio, es aquello que abre nuevas posibilidades, que nos proporciona la tranquilidad que necesitamos para sacar el máximo provecho de los beneficios del desarrollo humano, actuando dentro de un estado de derecho y protegidos por él.
Con una mayor tranquilidad y una seguridad mejorada, podemos hacer más y de una manera más efectiva, y así lograr los cambios que darán forma a nuestro futuro.
El negocio de Gemalto se centra en la identidad digital y la seguridad digital. Además de definir la misión corporativa, nuestra eslogan "Security to be free" (en español, seguridad para ser libres) se hace eco de los valores que están en el centro de cualquier sociedad digital sostenible.
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